PSICOFONIA DE OCHATE “VERSIÓN ORIGINAL Y EXTENDIDA”

Hola amigos, aquí estamos nuevamente para actualizar, pero antes que nada me gustaría dar las gracias por el gran éxito que está generando “VIDA Y MUERTE” entre todos los amigos del misterio y lo desconocido, puesto que ya estamos cercanos a las 6.000 visitas con este proyecto que para nada pensaba, que tendría la notoriedad que está consiguiendo.

Hace ya días, semanas e incluso meses, en mi canal “VIDA Y MUERTE” de Youtube, he recibido numerosos mensajes y comentarios, en relación al video de la psicofonia que obtuve en Ochate , en 2010. Muchísimos seguidores y amigos, me pedían que subiría la versión original del audio obtenido, y por fin he sacado un ratillo para hacer un nuevo video original en el que amplio parte de la conversación que grabamos, para intentar hacerla mucho más escuchable.

Para recordar un poco más la historia que lleva impresa esta psicofonia, tenemos que trasladarnos a una lluviosa tarde de Octubre del 2010, en lo  que queda del altar de la ermita de Burgondo, en el pueblo maldito de Ochate. Mi compañero de viaje, realizó una pregunta al aire segundos previos a encender la grabadora de su móvil, es por ello que no aparece en esta grabación. Este compañero el cual he citado, dijo en voz alta “somos cuatro personas y una perra” y posteriormente dijo nuestros nombres, todo ello repito, antes de encender la grabadora.

Cuando llegamos a casa y pasamos el audio al ordenador nos damos cuenta de que en el primer segundo de grabación, parece escucharse un susurro de mujer que dice “DELAUKO”. Tras una pequeña investigación, podemos concluir que puede ser euskera antiguo, algo que traducido podría venir a decir “SON CUATRO”.

Seguramente cada uno de ustedes tendrá su opinión personal, y es precisamente por eso por lo que os muestro el video, para ver si entre todos podemos llegar a una conclusión pareja.

La historia no acaba aquí, sino que un despiste hizo que nos olvidáramos el móvil en la ermita de Burgondo, grabando audio durante una hora, hasta que al final fue la lluvia la que dio muerte al teléfono. Al otro día por la mañana volvemos a Ochate para intentar recuperar el móvil, del que lo único que pudimos rescatar fue la tarjeta de memoria donde se encontraba la grabación, puesto que el teléfono no pudo resistir la tormenta de la noche y quedo empapado e inservible.

Una hora de grabación en la que apenas se escucha nada reseñable, salvo el canto de un pájaro, un caballo, y algún sonido extraño, tal vez generado por la ventisca de aquella noche. El silencio de la noche de Ochate especialmente para mi, es incluso mas aterrador, que cualquier psicofonia, quizás más adelante acabe colgando los 60 minutos de grabación del silencio de un pueblo muerto, pero que da la sensación que a ratos despierta de su profunda agonía.

Saludos amigos.